5529,9 km Dunedin - Fiordland - Glaciar de Fox ( capítulo 1)

Como el post es largo lo separaremos en capítulos, a lo Disney - Lucas.
Hemos estado unos días sin conexión con el mundo real... pero tampoco es que nos hayamos molestado demasiado en enterarnos de los sucesos. Por tanto, hoy haremos un post un poco... especial: mucho texto y más fotos (por si alguien quiere leer alguna cosa este fin de semana en lugar de poner la tele y oír a los políticos). Así que, si tenéis que elegir entre este texto y la política... es hora que salgáis al cine o al teatro.
Para los masocas que no quieran oír de política... aquí vamos.
Acabamos en... ¡ah sí!: Dune
Dunedin

Como nos sobran quilómetros y ratos muertos, por la mañana del día que estuvimos en Dunedin (ahora tendría que mirar un calendario... y como que no, que veremos cuantos días nos quedan y la tendremos liada con la predepresiónvueltaalarealidad), fuimos a la playa Sandfly de la Península de Otago a ver fur seals (leones marinos únicos en esta zona de NZ), y después a dar una vuelta por la ciudad.
La playa de Sandfly, en realidad, no es un sitio donde puedas ver a los leones marinos a lo lejos o detrás de una protección... simplemente están allí, y bajo tu (I)rresponsabilidad te puedes acercar a ellos.
Como toda la responsabilidad la tenemos guardada en la taquilla del trabajo, bajamos a jugar con esos adorables perritos de mar de varias toneladas, dientes afilados como dagas y un humor a lo clima de esta parte del país (impredecible cambiante de golpe)... así que nos dedicamos a hacer planking con los cachorrillos.

De allí, simplemente regresamos hacia Dunedin para hacer una visita por el centro, ver un poco la ciudad, y hacer una foto al edificio más fotografiado de toda Nueva Zelanda: la estación de trenes. Un edificio muy victoriano, con unos mosaicos geniales y salido de un decorado de película de época, pero curioso de visitar.

Otra cosa digna de visitar (que está en la otra punta de la ciudad, suerte del coche) es la calle más empinada del mundo (según el libro Guiness de los Récords), con un 30% de desnivel, donde después de jugar con la gravedad (más unas botellas, unos bolos, sillas de ruedas, bombonas de gas, un par de transeúntes y algunas cosa que no describiremos por desconocer la legislación local), salimos, con cierta prisa, hacia Fiordland, a la otra punta de la isla (quilómetros, al final, haremos).
-- Desde Mi iPad ... Somewhere in the infinity of the void!

Ubicación:Main Rd,Fox Glacier,Nueva Zelanda